El chico que iba saliendo del metro, vio a 2 sujetos corriendo para diferentes lados afuera de la entrada de un gran restaurante, mientras una multitud los veía sin entender que había pasado…hasta que el dueño del negocio lo entendió todo.
La chica hostess
observó como ambos sujetos, tanto el de pelo largo como el de chaqueta negra
salieron del local, sin que nadie se atreviera a separarlos. El de pelo largo
se colocó en posición de box preparándose a defenderse, pero inesperadamente el
de camisa metió su mano en su chaqueta como si fuera a sacar un cuchillo… o
quizás una pistola lista para dispararle, pero pasó algo impredecible…ambos
echaron a correr en una dirección contraria como si el mismo diablo los
persiguiera.
El Señor Ramírez
que llevaba a su hijo a comer a aquel restaurante que siempre le había prometido
donde decían que servían los mejores tacos de pastor de toda la zona observó toda
la escena:
-¿Porque no te
fijas en donde caminas?, ¿eres estúpido?-gritó molesto el señor de pelo largo
que estaba sentado después que el señor de camisa de cuadros le pisara.
-Usted es el
estúpido por dejar los pies fuera de la mesa- respondió el señor que llevaba
una chaqueta de cuero- no le costaba nada meterlos, era obvio que alguien le
fuera a pisar.
El señor de pelo
largo se levantó de su lugar. Ambos se miraron a los ojos con odio. Pero
también las demás personas en el restaurante se dieron cuenta que ambos eran
del mismo vuelo y una complexión parecida.
-¡Te voy a
enseñar a mirar por donde caminas!-dijo el señor de pelo largo.
-Quiero ver eso.
Vayamos a la calle a ver quién es quién…
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