Lo siguiente que voy a contar es desde la perspectiva de un niño hace algunos años cuando no existía el internet y ellos no cuestionaban aquello que otras personas decían.
Resulta que un
día cuando iba en la primaria, unos chicos se pusieron a jugar a la ouija en la
casa de uno de ellos, entre ellos yo. Pero en medio de la sesión, al ponerse el
ambiente pesado y ver que unas cosas se cayeron, salí corriendo de ahí.
Cuando le conté
que había jugado la ouija a uno de “mis amigos” me dijo que tenía que empezar a
hacer cosas buenas porque Dios no me iba a perdonar. Entonces tuve una
revelación. Mis hermanas mayores iban al coro de la iglesia y consideré que era
una buena idea cantar en el coro para que pudiera salvarme.
Y así fue, un día
comencé a ir al coro para acompañarlas y así poder salvar mi alma. Cabe señalar
que todos eran mayores que yo por varios años al igual que mis hermanas; y el
lugar donde se situaba el coro en la iglesia era en la parte de arriba de donde
estaban las bancas donde se sentaban los feligreses, por lo cual no éramos
completamente observables y para ir a ese lugar, tenías que subir por unas
escaleras. Al inicio estaba quietecito sin moverme, pero transcurrieron los
días y por ratos -solo por ratos-, me bajaba por las escaleras y me ponía a
caminar por la iglesia en lugar de estar en mi lugar cantando. Al final de al
cabo, después de escuchar las lecturas de los apóstoles me quedaba claro que en
la iglesia todos éramos bienvenidos y Dios quería que los niños nos acercáramos
a la Iglesia. Además Dios quería la salvación para todos ¿no?.
Creía ciegamente
en eso y que estaba haciendo lo correcto, pero un día, el que era el líder del
coro de la Iglesia enfrente de todos dijo que algunos nos íbamos a tener que
salir del coro y que al padre le molestaba que yo estuviera vagando por la
iglesia e interrumpiendo la misa (según él).
Y entonces,
considerando que el padre era el fiel emisario de Dios, me di cuenta que el
mismo Dios me había negado la posibilidad de salvarme…
Nota: Este blog
no es un blog católico, ni mucho menos, religioso. Todo lo que se comenta en
este blog se hace con el afán de entretener, por lo cual no hay que tomarse tan
en serio todo lo que estoy diciendo...
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