miércoles, 21 de junio de 2023

Realizando mini-retos de escritura de Lorena Amkie 2020. Reto 7…Y entonces te diste cuenta de que ese era el peor lugar para estar en pijama

 Este fue uno de mis preferidos...

Hola cariño:

Te escribo esta carta para comentarte lo que paso con nuestro hijo Guillermo de 8 años y también para que consideremos ponerle más atención a lo que hace y le piden en la escuela; además recordarte que el error no fue solo mío, sino de los dos.

Una vez que fuimos al mercado Guillermo dijo que quería un mameluco en forma de tiburoncito y decidí comprárselo y mi error fue dejarlo en una bolsa de plástico a la entrada cuando llegamos. Luego, compré el traje de soldadito para su bailable en el festival, era un traje bonito para verse elegante, e igual lo puse en una bolsa de plástico.

Entonces esa mañana del bailable, confundí la bolsa y me llevé la que no era y antes de que nos fuéramos, tú la revisaste y no se te hizo raro que fuera un pijama de cuerpo completo de tiburón. Al parecer, sabías que tu hijo iba a estar en un bailable, pero no sabías cuál iba a ser la temática.

Tampoco cuando lo ayudaste a arreglarse para el bailable te llamó la atención que los demás niños fueran vestidos de soldaditos y el nuestro de tiburón. No te molestes con lo que te voy a decir, pero quizás pensaste que el bailable iba a ser una recreación de que pasaría si la armada antaña de algún país europeo se hubiera cruzado con el megalodon de los océanos en algún momento de la historia.

Y mientras yo preparaba la cámara del celular esperando que nuestro hijo saliera vestido como los demás, cuál fue mi sorpresa al ver en el escenario que había un tiburón el que estaba bailando como los demás soldaditos y se notaba a leguas que la chica que le tocaba de pareja se veía incomoda. Las reacciones de los espectadores fueron diversos, hubo padres que no podían aguantarse la risa, había otros que fingían no darse cuenta de lo que estaba pasando, desde luego la Profesora quería intervenir para detener el espectáculo, pero no se atrevía.

Hasta que terminó el número musical la profesora al fin tomó a Guillermo y fue a hablar contigo, y entonces te diste cuenta de que ese era el peor lugar para estar en pijama


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